Al final no pudo ser. Problemas técnicos retrasaron al legendario SEAT Toledo Marathon que no pudo repetir la victoria en el RallyClassic África, que fue a parar a manos de los vigentes ganadores del Dakar Classic, Carlos Santaolalla y Jan Rosa, al volante de un veterano Toyota Land Cruiser.
El SEAT Toledo Marathon fue una vez más el gran protagonista de la carrera, pero una avería que afectó a la transmisión le impidió acabar la prueba al mismo ritmo que la comenzó. Toni Rius y Carles Jimenez se alternaron en la primera posición con la tripulación del Land Cruiser con el número 2, el de Santaolalla-Rosa, hasta que el SEAT se quedó sin tracción en el tren trasero. A partir de ese momento el piloto de SEAT bajó el ritmo para no dañar el valioso prototipo español, sacrificando alguno de los últimos pasos por las dunas del desierto de Erfoud. El SEAT Toledo Marathon terminó la prueba y llegó a la meta junto a los cinco SEAT Ateca Marathon que tomaron parte en la prueba, pero retrasado, en la decimoquinta posición. “Ha sido una pena”, comentaba resignado Isidre López, director de SEAT Históricos. “Hemos tenido que bajar la marcha para no dañar el motor y otras partes del coche. Lo más duro ha sido que cuando llegó el problema éramos líderes y estábamos controlando la carrera. Aún quedaban muchos kilómetros y este año la competencia era muy importante y podía ocurrir cualquier cosa, pero sin duda teníamos muchas opciones de repetir victoria. Mi enhorabuena a los ganadores, creo que ha sido una carrera muy bonita y competida. Volveremos más fuertes”.
El RallyClassics África 2024 fue, por segundo año consecutivo, un gran éxito, tanto por la variada participación, como por el recorrido y la exquisita organización. En el parque cerrado había equipos procedentes de Francia, Italia, Holanda, Argentina, Estados Unidos y la más numerosa, de España, y por primera vez con varios equipos locales, equipos marroquís, alguno de la misma zona de Erfoud, auténticos expertos en las complicadas dunas que formaban parte del difícil recorrido.
El cartel de la prueba era sensacional, del 12 al 18 de septiembre, con un recorrido formado por cinco etapas para completar 700 kilómetros cronometrados aproximadamente, algo más de mil kilómetros si incluimos los enlaces con un formato muy válido para entrenar el Dakar Classic. Pero a punto estuvo todo de irse al traste por culpa de las lluvias torrenciales que cayeron en la zona y que cambiaron los habituales áridos ríos de arena, los oueds, por ríos con crecidas en ocasiones preocupantes incluso para las poblaciones de la zona. Toda la responsabilidad de la carrera recayó sobre los responsables de trazar el recorrido, el experto Josep María Serviá y su mujer, Fina Román, dos expertos que no se achicaron ante la complejidad y casi sobre la marcha fueron capaces de rehacer el rallye evitando las zonas más problemáticas. Un trabajo enorme que tuvo un resultado perfecto.
Junto al SEAT Toledo Marathon tomaron parte en carrera cinco SEAT Ateca TDI 150 CV “Marathon” encuadrados en la categoría Open, en la que se puede competir con coches modernos, pero sin optar a la clasificación final del RallyClassic África 2024. Tres unidades fueron pilotadas por periodistas invitados; Telva Somoza (Marca) copilotada por Raquel Cecilia, Enrique Ruiz (Autobild), copilotado por Aran Sol y Ramiro Mansanet (Boosters) junto a Antonio Angulo. De ellos el mejor fue el pilotado por Enrique Ruiz-Aran Sol, que se impuso en la categoría Open 4×4 y que incluso terminó la prueba en tercer puesto absoluto, aunque este resultado no computa en la clasificación general, que está reservada a vehículos clásicos (PRE-1997). Las otras dos unidades hicieron funciones de asistencia rápida, una de ellas pilotada por el jefe de mecánicos, Josep Capsada, copilotado por Isidre Lopez, mientras que la segunda unidad de asistencia rápida la pilotaba Juan Pablo Cardama, mecánico electrónico que era copilotado por Marc Escoda, mecánico de chasis.